jueves, 17 de octubre de 2013

La llama que ilumina y da calor a la vida.





Tenía una vida vacía, llena de nada.  Había andado mucho, sus pies estaban ya cansados; tanto, que no caminaban, se arrastraban.

Pero sus ojos seguían siendo niños, verdes, brillantes, llenos de vida y de ilusión.

Mirarle de frente era encontrar un desconcertante contraste: el cansancio y el dolor de todo el tiempo perdido en tierras extrañas contra la ilusión de llegar a encontrar su meta, su casa, un hogar para su alma ya cansada.

Cuando algo está vacío, es fácil que penetre cualquier cosa. Cuando es de noche, cualquier luz puede parecernos la luna, o incluso el comienzo de un amanecer. Y eso fue lo que le sucedió.

Encontró en la luz de una sonrisa el deseo de volver a amar. Disfrutó observando en la distancia, hasta que milagrosamente esa luz se acercó a él. No lo podía creer.

—     ¿Cómo alguien tan brillante puede pararse a pensar en mí? — se dijo.

Cierto, no lo podía creer, seguía sin poder creerlo, y aún así decidió darse la posibilidad de descubrir qué podía pasar.

Lo que sucedió fue que charlando con la luz se sintió como si ese fuese su estado natural; las sonrisas brotaban solas, las miradas bastaban para entenderse, entre palabra y palabra las bromas hacían de las suyas...

Y llegó la noche, la luz se fue... pero dejó su corazón iluminado para siempre.

Con el tiempo comprendió que esa luz iba iluminando y prendiendo pequeñas llamas, miles de llamas, muchas igual que la suya, pero no le importó. Su llama era especial, no le molestó que su luz se alejase en la distancia para no volver jamás. Lo que esa luz debió hacer en su vida, "prender la llama que iluminaría los próximos años", ya estaba hecho; lo importante es que dejó de sentirse cómodo en su oscuro vacío y de sentir miedo de construir un mañana diferente.

 

Roberto Kamé. © 2013
 
(Imagen tomada de internet, de autor desconocido)
 

2 comentarios:

  1. ES COMO EN LA VIDA MISMA .....PRECIOSOOOOOOOOOOOO

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    1. Gracias. Se lo comentaré a Roberto; se alegrará. Un abrazo.

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