lunes, 27 de agosto de 2018

Aniversario





Mirar atrás, sentir cómo el latido
galopa hacia el abismo
y  de tu  enamorada voz
quedan ungidos mis sentidos.

Mirar atrás, sentir cómo tus manos
atrapan mi cintura enamorada
y acarician pueriles mejillas sonrosadas
que sueñan atrapar tu flechado beso.

Mirar atrás, sentir cómo tus sueños
abrazan a los míos
y crea un mismo futuro incandescente
lleno de luz, amor y anhelos.

Mirar atrás, sentir cómo el presente
cambió sus tonos y vistió de gris,
añurgó cualquier vida futura entre tus manos,
tus manos despiadadas, crueles, de verdugo.

Mirar atrás, sentir cómo la fortaleza
siempre se nos ofrece
y en cada cielo  brilla un trozo azul
al que aferrarse.

Mirar atrás, sentir cómo tu traición
fue la llave de mi libertad.
El único amor que es para siempre
es el que no pudiste arrebatar.

Observar el presente, saber que me miras.
Desde lejos tus ojos se clavan
buscando las respuestas.
No fuiste esposo ni padre.

La vileza se anuda en tu cuello
como antes fueron tus dedos en el mío.
Rompiste toda magia, todo amor,
quebraste la quimera, ahora suéñame en la distancia.



© Irene Bulio


martes, 7 de agosto de 2018

Brumas grises






Duele el vacío, hielo en este pecho
enloquecido de ausencias. Sin ti
sin tu mirada, nunca más viví
pues tanto desamor hiere en el lecho. 

Parpadeo feliz, por si te flecho,
por si de nuevo llegas hasta mí
tal como en versos ya escribí
pensándote feliz y satisfecho.

Mientras, busco tu aliento en la mañana
extendiendo mi mano hasta tu espalda,
y una lágrima negra el rostro enjuaga.

Como en los sueños,  real y tan lejana
late tu tenue luz, brillo esmeralda.
Quiebra  mi corazón por esta daga.


Inma Flores © 2018