La sensación de entrelazar tus dedos
con los míos; los nuestros.
Un simple gesto, una gran hazaña
que deja atrás los cristales rotos
de los viejos sueños.
No es un futuro, siquiera un pasado,
sólo un efímero presente,
un regalo “estrella fugaz”;
que como tal pasa rápido
y a la vez te ilumina el alma.
Difícil de olvidar, y sin embargo,
debes dejar atrás,
para nunca volver sobre tus propios
pasos.
Irene Bulio © 2014
Foto tomada de internet, de autor desconocido.
Para eso ponemos nuestras fuerzas, deseos o esperanzas de emerger, de seguir caminando, un solo punto de destino, la felicidad, mejor si lo hacemos sin volver la vista atrás, al menos no forzar la mirada hacia ese lugar o ser al que se quiere olvidar. Lindas letras mi querida Inma, además, las percibo como llenas de esperanzas. Un abrazo enorme.
ResponderEliminarA veces los pequeños gestos que forman la cotidianeidad, que nos costaron un triunfo lograr son los peores de olvidar, porque te llegan sin querer, por ser tan simples.
ResponderEliminarSin embargo, de los grandes gestos ya nadie se acuerda porque la vida no está hecha de grandes batallas sino de pequeñitas ganancias y pérdidas.
Espero con todo mi corazón que ese recuerdo vuelva a acompañarte toda tu vida sin tener que traer dolor sino que sea nuevo y tierno, de confianza.
Un abrazo.